Una novela de temática un poco diferente a la que acostumbro a subir en mi web. Sin embargo, me ha parecido acertado destacar que, libros como estos, es casi necesario leer al menos una vez en la vida. Son constantes las historias que narran vivencias personales que pueden ser identificadas con las propias, y eso es de lo mejor que esta novela ofrece. Por eso, y porque me he sentido identificada con algunas de sus anécdotas, la novela El Club de los Viernes es más que recomendable.
Cuando decidí leerme todos los libros pendientes que me han ido regalando con el paso de los años, ni siquiera me acordaba de este. Sin duda, una novela que no llamaba mi atención demasiado. Aun así, tenía que buscar una lectura para mis trayectos en tren de casa al trabajo, y viceversa. No sabía que los momentos leyendo sus páginas los guardaría con mucho cariño.
¿De qué va la novela El Club de los Viernes?
Ocho mujeres muy diferentes utilizan una tienda de lanas en Nueva York como punto de encuentro para ser ellas mismas. Comparten sus vivencias y sentimientos entre ellas, construyendo un vínculo que se convierte en amistad. Historias entrelazadas con un profundo significado para todos los involucrados.
Todos necesitamos un Club de los Viernes
Si tuviera que dar yo misma la respuesta, está sería: «por supuesto». Me parece llamativo pensar que, mientras escribo este post, me acuerdo de una frase que escribí sobre el libro de las pequeñas revoluciones: «Existen muchas frases en el libro que nunca sabes lo bien que te van a venir», y eso es exáctamente lo que sentía con cada nueva página que pasaba.
No voy a intentar imponer mi opinión de lo mucho que me ha gustado esta novela. Solo puedo añadir en este punto que muchas veces, cuando parece que el mundo se nos viene encima y necesitamos un break, es adecuado elegir una lectura relaja y dejarse llevar. El club de los viernes es una experiencia personal que recomiendo encarecidamente. Como una reconocida amante lectora que se está reencontrando con este pasatiempo tan entretenido, leer temáticas como las que se narran en el libro es bastante recomendable porque seguro (en algún detalle) te sentirás identificado.
Con esto no quiero decir que esta novela pueda sustituir a un libro sobre psicología. Mi punto viene a que, en ocasiones, es más adecuado entenderse a uno mismo por los relatos que lee en algunas historias ficcticias que entre las páginas de una libro escrito por un especialista en la mente y comportamiento humano.
Un toque personal entre tanto caos social
La relación entre los personales, decisiones que implican desdamores o nuevas vidas en camino son algunas de las pequeñas historias que implican que las protagonistas deban elegir un camino u otro. Las responsabilidades y pequeños deseos sin cumplir también hacen acto de presencia. No hay adornos ni cintas de colores llamativos, las «aventuras» discurren durante toda la novela como si fuera la vida misma.
En resumidas cuentas, este libro va dirigido a los que buscan vivencias personales para reconocer sus historias en propias carnes. Un dato curioso es que esta novela es la primera parte de una trilogía. Un episodio que refleja la realidad de mucha gente que se «enfrenta» a diario con los pequeños retos de la vida. Una lectura que te absorverá y no querrás dejar de lado. Acosejado para las noches en vela o las tardes de fin de semana cuando el clima no acompaña.